Delegaciones: Extensiones del tricolor y verde

El espíritu centralista de la federación no sólo se muestra y demuestra con el control que el gobierno federal ejerce férreamente sobre el presupuesto y las participaciones a las Entidades Federativas sino que además, se extiende al control político sobre las personas o políticos que operan los programas sociales del presupuesto federal en los Estados.

    Las participaciones federales son una forma de ahorcar a los Estados, en especial a aquellos donde sus gobernadores son de símbolo partidista distinto al del gobierno federal. El condicionamiento de tales participaciones federales también se ejerce sobre las posibles o probables participaciones federales a los Estados sumisos que han depuesto, por falta de valor o complacencia, la defensa de sus derechos sociales o financieros.
    Contrario a lo que la población cree, las participaciones federales no son entregadas como dinero contante y sonante a los Estados, sino que, son la suma de los gastos y egresos presupuestados como programas federales. Por decir algo, el dinero del presupuesto para gasto social que la Federación asigna para Tabasco, no es dinero en efectivo, sino gastos que la Federación realiza vía Sedesol –por ejemplo- en Tabasco. Es dinero presupuestado no lo toca el Estado, aunque la federación arguye que se invirtió o se gastó en Tabasco.
    El favoritismo en esta repartición de egresos federales es símbolo definitorio de tal política. Siempre se privilegia al Estado que más agrada al Presidente, en este caso al Estado de México, con FeCal a Michoacán y con el vaquero Fox, a Guanajuato. Y no les importa que ni Estado de México, Michoacán o Guanajuato aporten millones de veces menos que Tabasco al gasto federal.
    A Tabasco la Federación le reduce constantemente las participaciones: se registra caída constante de ellas. Con mayor intensidad y cuantía desde el arribo al gobierno estatal de una fuerza política distinta a la del Presidente: hasta septiembre de 2014 la caída en participaciones era de -5.4% en las del Fondo General de Participaciones y del -2.2% en el total de las que se destinan al Estado; en las de los municipios del Estado, la caída de participaciones suma, a esa fecha, el 4.52%.
    O te asfixio o te ahorco, es el lema de la Federación sobre el Estado.
    Hay además otras dos formas políticas de control sobre los gobiernos estatales. La designación de los Delegados Federales y la instrucción a éstos de destinar el dinero de los programas federales para fortalecer a un determinado político o a favorecer ha determinado partido político. Y lo peor, la complacencia que esta práctica perversa logra de los actores políticos y operadores locales.
    Es notorio que todos los delegados de dependencias federales en Tabasco, hasta de las que podría pensarse no tienen tinte político o presupuestario, son empleados del PRI y sus designaciones se deben a su filiación política con tal partido. Son la extensión del gabinete de Peña en Tabasco y el brazo ejecutor extendido de la política centralista opresora de la Federación. Todos.  Por datos que tenemos corroborados, comparto con ustedes la información siguiente.
    Con el pretexto de la promulgación por Enrique Peña Nieto de las leyes sobre energía, los Delegados de las dependencias Federales en las Entidades Federativas fueron convocados a reuniones con sus superiores en la Ciudad de México. A todos ellos se les instruyo: todo a favor del PRI, recursos, programas, dádivas, si querían seguir en sus puestecillos; ¡No para otra tarea los designó la Federación! Y aquellos Delegados de esas dependencias federales en los 17 Estados y el Distrito Federal donde en el año venidero (2015) se efectuaran elecciones, sea para Presidentes Municipales, Diputados Locales y Gobernadores, tuvieron una reunión plus con el Secretario de Gobernación quien les emitió la instrucción precisa, para que no hubiese duda: todos los recursos de los programas federales deben ser destinados para apoyar, impulsar y poner en situación de preferencia electoral al PRI y a los futuros candidatos del PRI a esos puestos.
    El entonces recién designado Delegado Federal del INFONAVIT, Bellizzia Aboaf, denotó gran entusiasmo. Algunos Delegados Federales arguyeron que estaban de acuerdo totalmente en tal “estrategia” pero que funcionaría mejor el asunto y asegurarían el triunfo priista en las futuras elecciones si ya supieran quienes van a ser los futuros candidatos. Cándidos, los Delegados Federales, querían arrancarle al operador Secretario de Gobernación, nombres de candidatos para alinearse. Surgieron algunos. En el caso de Tabasco la instrucción fue, contra la creencia mayoritaria de los Delegados Federales que pensaban iba a surgir o Benito Neme Sastre o repetirse el nombre de Jesús Alí de la Torre: tienen que hacer todo, destinar todos los recursos y los esfuerzos para que Humberto Domingo Mayans Canabal se posicione.
    Las hermanas Trujillo no estuvieron muy de acuerdo, al extremo que Georgina, espetó que ella tiene su estructura y ha “trabajado” para ser ella postulada. Al grupejo Trujillo se le ofreció, de entrada, la Delegación de la Cruz Roja (para la hermana mayor), pero también su ambición es mayor. Otro que se revuelve en su enojo es Evaristo Hernández, quien nuevamente será puesto a un lado. Otros arguyeron que el “favorecido” no era miembro del tricolor y que incluso lo había traicionado yéndose al verde –partido que lo postuló a Senador-, por lo que su postulación por el tricolor violaría descaradamente sus Estatutos.
    El operador de más alto nivel les indicó: Verde y tricolor son lo mismo; aquel partido servirá como la mano del gato para sacar las castañas del fuego para el tricolor sin quemarse; y les dijo más: Alí y Humberto son lo mismo, enviamos dos para que a uno le peguen, absorba los golpes y distraída a los adversarios. Y ahí andan.  
    Dada la instrucción, atrás quedó el grupito de politiquillos que se reunían ya sea en Puerto Ceiba o en Pueblo Nuevo en torno a Jesús Alí o hacían campaña en un inmueble de la Avenida Niños Héroes; y lo que más les duele a muchos, es que ya les habían pasado la “charola” y habían aportado fuertes y medianas sumas en busca del reposicionamiento de Alí de la Torre.