Albergue atiende a migrantes enfermos

Entre setecientos y ochocientos migrantes atiende anualmente el albergue para migrantes de El Santuario, Macuspana, abierto desde el 2010, en donde principalmente se refugian quienes se han quedado tirados o están  enfermos, afirma Amado Esteban Zacarías, quien encabeza el equipo que del Centro de Atención de Migrantes El Santuario, ubicado en Macuspana.

    Esteban Zacarías afirma que este año, se ha incrementado el paso de niños y mujeres, en comparación a otros años y que en las últimas semanas ha disminuido el flujo de migrantes por la política recién implementada por el gobierno federal, que les impide abordar el tren de carga, por lo que ellos han optado cruzar el estado caminando.
    Las personas que más atendemos son las que llegan al albergue enfermas, heridas y las que desconocen el camino, porque es la primera vez que viajan.
    Desde que se puso en marcha el nuevo operativo de la policía federal y el Instituto Nacional de Migración,  hemos recibido a un número menor de migrantes y nos admira que en “la bestia” solo viajan cinco  o diez , es algo que nos admira.
    Los que se resguardan en este albergue nos han comentado que la policía o los agentes del INM los obliga a bajarse por la fuerza o con amenazas de detenerlos, por eso han decidido caminar y por eso está llegando  gente con muchas heridas, con fiebre y deshidratados debido al esfuerzo y a que vienen rodeando por los cerros, afirma Amado Esteban.
    No sabemos hasta cuando mantendrán esa política, pero el migrante “es terco” y se vendrá caminando, asegura el presidente del Centro de Atención de Migrantes El Santuario.
     Amado Esteban explicó que el equipo que colabora en ese centro son siete personas, él su esposa e hija y otras cuatro personas más que se ocupan de proporcionar dos alimentos al día a cada persona y agua y  atender a los enfermos y heridos, pero atrás de nosotros hay otras que trabajan en el anonimato y que son las que consiguen el arroz, el frijol, ropa usada.
   Mi familia y los otros cuatro compañeros son los que damos la cara, los que directamente atendemos a los migrantes, nuestro trabajo es ayudarlos lo más que podamos sin descuidar su salud.  Mencionó que ahí los migrantes no solo pueden descansar sino también bañarse y lavar su ropa, pero la más importante ayuda que proporcionamos es atender s los enfermos, dice.
   Cuestionado en relación a la intimidación de la que fueron objeto quienes ahí proporcionaban ayuda cuando recién se había creado ese centro en el 2010, Amado Esteban, responde que afortunadamente ceso y que tampoco se han visto amenazados por bandas criminales. Estamos trabajando de manera normal, en comparación las agresiones que padece el albergue de la 72 en Tenosique, quizá porque ellos proporcionan ayuda a un número mayor de migrantes y porque es puerta de entrada, agregó.