Atletas de oro y bronce: Orgullo tabasqueño en los deportes

Villahermosa, Tab. Junio del 2017.- Durante la transmisión del programa “Orgullo Tabasqueño en los Deportes”, en Televisión Tabasqueña (TVT), se presentó a Kayla Isabel Pimentel Fuentes, joven atleta que reveló los retos que tuvo que vencer, así como los apoyos recibidos para lograr ser medallista olímpica nacional.
    Frente al teleauditorio de Tabasco y la región sureste, Pimentel Fuentes rememoró su entrada fortuita al atletismo: un día pasó a recoger a una amiga a la Ciudad Deportiva y alcanzó a ver los entrenamiento que llevaba a cabo el profesor Felipe Cachón Gómez; apenas llegó a su casa, expresó a su madre el deseo imperioso de ser parte del equipo de atletismo.
    “Empecé con salto y a correr los 75 metros, nada más con el deseo de entrenar. No me veía en competencias”, admite la joven tabasqueña.
    En 2012 logró pasar al campeonato nacional de atletismo, organizado por escuelas primarias, donde quedó en tercer lugar, en 75 y 150 metros, ganando dos preseas de bronce. Nada mal para una joven sin ninguna experiencia competitiva.
    “No esperaba pasar a una final, yo sólo iba a competir porque me había gustado entrenar, entonces subir al podio de honor fue para mí otra cosa, más escuchar el Himno Nacional. La verdad fue una sorpresa ver esos resultados en mi persona”.
    Para la joven corredora representar a Tabasco marcó para siempre su preparación. “No me gustaría representar a otros estados. Significa mucho para mí representar a Tabasco en cada competencia”.
    El que entrara desde joven al atletismo le dio lo que necesitaba: disciplina. “Fui aprendiendo a combinar el atletismo con la escuela. Sinceramente no se me hizo difícil. Ahora que estoy en prepa, ya estoy más que acostumbrada, sino entreno en a tarde o en la mañana no me siento de la misma manera”.

SE CUBRE DE ORO Y PLATA

Pasar de competencias regionales a una Olimpiada Nacional fue un proceso lento pero seguro. “Tardé mucho en participar en una Olimpiada Nacional, apenas el año pasado fue mi primera clasificación, pero me di cuenta que sí podía hacer las cosas y este año lo logré”.
    Pimentel se refiere a la medalla de oro y plata que consiguió en los 100 metros libres y con vallas. Para lograrlo tuvo que vencer sus miedos. “Hace dos años me lesioné con las vallas y por el mismo miedo, el año pasado no las pude hacer tampoco, pero este 2017 me animé a hacerlas y triunfé.”
    Su mayor apoyo, además de su entrenador, es su familia. Su madre la acompaña a los entrenamientos en la Ciudad Deportiva. Y cuando son competencias regionales, le toca a su padre seguirla.
    “Sinceramente, mis papás me apoyan al 100 por ciento. Es muchísimo el apoyo que me dan y estoy muy agradecida con eso. Mi padre siempre se emociona mucho”.
    No faltan nunca los consejos maternos, que actúan como mandalas porque van dirigidos a su mente más que a su cuerpo: “no te achiques”, “concéntrate en lo que haces”, “es una carrera para ti, no para los demás”.
    Cada entrenamiento es una oportunidad de superarse. Por eso, en cada uno se toma su tiempo para ir ajustando sus propias marcas y exigirse más. “Checar los tiempos cada semana ayuda a darme cuenta cómo voy creciendo conforme avanza el año, cuando estamos en competencias regionales para foguearnos con mira a la Olimpiada Nacional, son esenciales esas tablas de récord para evaluarnos”.
    Ser orgullo tabasqueño en los deportes es resultado también de los consejos y preparación impartidos por su entrenador. “El profesor Cachón siempre nos recuerda que hemos demostrado que podemos hacer las cosas, dar los tiempos”.
    De las fallas ha aprendido a remediarlas, a aprovecharlas para salir avante. Por ejemplo, hace dos años no tuvo buen rendimiento en las justas porque no estaba bien concentrada. Y se dio cuenta que si quería ganar tenía que concentrarse al máximo y no distraerse.
    Así pudo pasar el año pasado de ocupar los primeros cinco lugares en las justas invernales a subir al pódium del primer lugar en las competencias nacionales.
    Aunque, aclara, la mentalidad de una campeona no es pensar en una medalla. “Hay cosas que pueden cambiar en una competencia. Y no siempre podemos estar seguros de que vamos a conseguir una. Hay que tener la seguridad de que podemos alcanzar el triunfo, pero no pensar en la medalla para no decepcionarse por si no la consigues. Si lo logras, a festejar, claro”.

VALE LA PENA EL ESFUERZO

María Fernanda Priego es otro orgullo tabasqueño en los deportes: en el 2016, ganó la medalla de oro en la prueba de 100 metros con vallas. Ese mismo año consigue ganar el Premio Estatal del Deporte.
    Al año siguiente, en la Olimpiada Nacional del 2017, volvió a subir al pódium en la misma prueba, sólo que esta vez ganó medalla de bronce.
    No fue fácil encontrar donde mejor pudiera desarrollar sus capacidades, pues lo intentó en varias disciplinas hasta que quedó en la que ahora es medallista olímpica. “Mi primer año fue en el heptatlón, ahí quedé en tercer lugar regional, pero no me gustaron las pruebas de los mil metros, de altura y bala, esas pruebas no me gustaban, pero lo que era vallas, velocidad y salto de longitud, esas sí me gustaron”.
    Como Kayla, también ella ha recibido el apoyo de sus padres.  “Siempre que me tocaban correr los mil metros me ponía a llorar, pasé el regional y lo mismo. Mis padres me decían que ya estaba ahí y que debía de aprovechar, pero el siguiente año les pedí que hablaran con el profe Cachón Gómez y me metieran  a otras pruebas y le echaría el doble de ganas, y lo que hicieron fue apoyarme y alentarme en mis decisiones”.
    La medallista olímpica reconoce que el camino no ha sido fácil “Tienes que saber equilibrarlo, el deporte te quita tiempo en las tardes, más que a nivel profesional debes dedicar dos horas, pero yo debo estudiar el doble, además de que el fin de semana lo ocupo para hacer mis quehaceres en la casa y ver un poco a mis amigos”.
    Vale la pena el esfuerzo. “Ha habido bajas y altas. Una lesión te deprime porque debes descansar días e ir a rehabilitación para sanar, te quita tiempo para seguir creciendo. Yo tuve dos lesiones y me sentía triste. Pensaba que si la lesión llegaba a más, acabaría mi entusiasmo, Pero con la terapia logré sanar”.

CON MIRAS EN JUSTAS MUNDIALISTAS.

 Quien mejor las  conoce en las pistas es su profesor Felipe Canchón Gómez, entrenador del equipo de atletismo en Tabasco, quien define a Kayla Isabel como “un ejemplo para toda la adolescencia y juventud de Tabasco, es una persona que se ha esmerado en su preparación: tiene una total entrega en los entrenamientos. Y en su vida privada es muy ordenada”.
    Cachón Gómez opina que María Fernanda Priego “nació atleta, ya que con una semanas de entrenamiento transpira sus cualidades. Trabajamos juntos desde hace dos años y hemos estado en el Top de la Conade, pienso que tiene mucho futuro por delante”, reconoce que le entusiasma entrenar a este par de jóvenes quienes son un Orgullo Tabasqueño en los deportes.