• La Verdad del Sureste |
  • Viernes 26 de Abril de 2024

POSTAL DE CRONOS

El Rey Midas del petróleo y los díceres de Erubiel


Ulises Rodríguez Guzmán


El frecuente comentario del líder del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Erubiel Alonso Que, donde asegura que ´la gente está cansada de los gobiernos de izquierda debido a que no han funcionado´, no sabemos si adjudicar su dicho a alguna enfermedad que le impida siquiera apelar a su sentido común o alguna afectación crónica que a pesar de su juventud no le permita ver la realidad por la cual los tabasqueños decidieron que el Revolucionario Institucional dejara de gobernar desde el 2012 esta región del sureste de la República Mexicana.

    No hay más ciego que el que no quiere ver, es un lugar común que se puede aplicar a los díceres de Erubiel Alonso. El PRI gobernó Tabasco por más de 80 años, lo mismo que el país hasta el 2000, y los resultados han sido catastróficos. Para muestra, la situación crítica en la que nos encontramos en todo el país, no sólo Tabasco. Vivimos un retroceso que se parece más a lo que padecieron nuestros antepasados en los 35 años de dictadura por parte del general Porfirio Díaz, con la diferencia de que hoy la esclavitud está más sistematizada y la tecnología es usada para mantener el poder político a pesar de la injusticia social que priva en la mayoría de los estados de la República Mexicana.
    En el caso particular de Tabasco, la transición política apenas ocurrida en 2012 y la magnitud del rezago en que tantas décadas de gobiernos priistas causaron daño en todos los rubros no es fácil que por arte de magia se puedan resolver los problemas que se padecen en el estado con la premura que ahora reclama Erubiel Alonso. ¿Cuál es el resultado de más de ocho décadas de gobiernos priistas? Que respondan con toda sinceridad los tricolores de altas cúpulas esta pregunta. Aunque hay que reconocer que en algunos lapsos hubo gobiernos como el del maestro Francisco J. Santamaría, el ing. Leandro Rovirosa Wade y el lic. Enrique González Pedrero en que hubo crecimiento en nuestro estado a pesar de que en algunos de ellos todavía no se contaba con recursos del boom petrolero. De ahí en adelante, que diga el dirigente tricolor qué gobiernos priistas han funcionado en Tabasco y cuáles se han distinguido por ser honestos, democráticos y sobre todo efectivos en su quehacer como servidores públicos.
    Erubiel Alonso prácticamente culpa de la crisis que hoy se padece en Tabasco al gobierno de Arturo Núñez, puesto lo que más le duele a los priistas es haber perdido la gubernatura en las elecciones de 2012. Alonso Que, no dice que el pueblo se cansó de los excesos del PRI a través del gobierno del químicamente puro Andrés Granier Melo y su camarilla de saqueadores; que desde hacía varios años esos saqueos de las arcas del erario público en el estado eran práctica común y evidente por los antecesores gobernantes priistas. Tabasco no es un estado moderno además de que tiene la peor fama de corrupto en la región del sureste. ¿Le debemos esto a los gobiernos de izquierda como señala el dirigente del PRI tabasqueño? En efecto, en nuestro estado podemos ver que algunos alcaldes de extracción perredista no han trabajado como la supuesta ideología de servicio al pueblo se los manda y han actuado como los gobiernos que antes criticaban: con la misma manera deshonesta priista. ¿Cuál es la moral que supuestamente defiende Erubiel Alonso?
    Y es además lógico que el dirigente tricolor tabasqueño asegure que su partido político no se cerrará a la posibilidad de las alianzas con otros partidos. Ya se sabe de qué se habla y qué componendas ha realizado el PRI en un pasado inmediato; qué partidos son tentáculos de sí mismo y que en ningún momento se traten de alianzas puramente democráticas y con vías a establecer la ansiada justicia social por parte de los ciudadanos.
    Si el partido que asegura Erubiel Alonso es moralmente intachable y no le cierra las puertas a otros partidos con el objetivo de querer recuperar las posiciones estratégicas que pudieran devolverle la gubernatura en 2018, no es sorprendente que él defienda con tanto ahínco la candidatura de Pilar Córdoba Hernández por el 6º. Distrito a pesar de la supuestas acusaciones contra el líder petrolero, pues sabe que está apadrinado por el poderoso Carlos Romero Deschapms. Le apuestan a la conveniencia del priismo tabasqueño, pero también para el  mismo gobierno peñista y su reforma energética. No le importa defender lo indefendible porque Pilar Córdoba le será redituable y eso es lo que verdaderamente le importa a él y a su partido: los resultados, el pragmatismo político, el beneficio de las élites que lo conforman. Pretenden darle al pueblo algo, lo de siempre: las migajas.