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Por enésima ocasión José Ángel Alcudia Gil, conocido con el sobrenombre de “Buda”, es protagonista de un hecho ignominioso dentro del ámbito deportivo; al supuestamente tratar de, robar de intimidar y agredir a un presunto líder de una liga de balompié, por lo que el agraviado interpuso una demanda penal.
    Erick Castillo de la Cruz, la víctima, se dice propietario del proyecto denominado Liga Tabasco Inter-Bachiller, que llegó para hacerle sombra a una equivalente; de la cual el agresor es el responsable, que al parecer se empezó a debilitar, porque algunos equipos se pasaron al gremio de  nueva creación al visualizar que el Buda los utiliza como negocio.  
    Las cosas se tensaron, que en el transcurso de la semana que está por finalizar, a unos pasos de las oficinas del Instituto del Deporte de Tabasco (Indetab), ubicadas en la Ciudad Deportiva, se dio el citado  encuentro detestable para el espíritu deportivo que impulsa al “Juego Limpio”.
    Lo ocurrido es una prueba más que todas a la mayoría de las ligas deportivas que nacen o existen lo hacen por un interés más personal que deportivo,  porque cuando les autorizan el uso de una cancha publicas ya se sienten dueños  y alzan su voz si el público quiere usarlas durante sus torneos, porque se los desfasan.
    En un hecho que las instalaciones se edifican con dinero de los impuestos, para uso del pueblo y en particular el deporte organizado, que demuestre que está legal y legítimamente constituido. Ligas, donde los árbitros no pagan gravámenes, pero ganan más por silbar un partido  que un día de trabajo de un custodio que vigila a los peores criminales.
    En países como México el amateurismo  desapareció. Los gremios recreativos y los torneos que organizan en instalaciones gubernamentales son una industria para sus directivos.  Todo esto ocurre por el desinterés de los legisladores en aprobar una ley que reglamente los entes deportivos conocidos como Asociación Civil (AC) en correspondencia a sus derechos y obligaciones.
    En el caso del brete entre el par de directivos, el afectado interpuso una demanda penal. Si el presunto culpable resulta condenado de inmediato debería de ser expulsado, si es afiliado, de la  Asociación de Futbol del Estado de Tabasco y de no formar parte del deporte organizado se le prohíba organizar eventos en instalaciones oficiales. El poder es el poder.