Un total de 544 exempleados de confianza de Petróleos Mexicanos (Pemex) reciben pensiones que superan el salario anual de la presidenta Claudia Sheinbaum, según datos oficiales. Entre ellos se encuentran exdirectivos vinculados a casos de corrupción como Odebrecht y la compra de Agronitrogenados.
Las pensiones oscilan entre 2.8 y 4.2 millones de pesos brutos anuales. Al menos 15 de estos exfuncionarios perciben más de 340 mil pesos mensuales, cifra que representa hasta 36 veces el promedio de un jubilado común en el país.
Los dos pagos más altos corresponden a Marcos Ramírez Silva y Roberto Ramírez Soberón, exdirectores de Pemex Gas y Petroquímica Básica, quienes reciben 4.2 millones de pesos cada uno, 47 por ciento más que la remuneración de la actual presidenta.
Otros exfuncionarios con pensiones similares son Miguel Tame Domínguez, exdirector de Pemex Refinación, señalado en el caso Odebrecht, así como José Antonio Escalera Alcocer y Juan Javier Hinojosa Puebla, quienes también fueron investigados por presuntas irregularidades.
Frente a este panorama, el gobierno federal analiza impulsar una reforma para limitar lo que calificó como “pensiones ofensivas”, pues varios beneficiarios continúan trabajando en empresas privadas mientras reciben estos montos millonarios.
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